Película Passion Play con Megan Fox no llegará a las salas de cine

Es una lástima. Una formidable película relatada con una técnica intencionada de los años 50 donde brillan los homenajes al cine estadounidense: la escena del matón -a cargo de Bill Pullman- contemplando “Fuerza bruta” (1947, con Burt Lancaster)es uno de los más imaginativos acerca de una mujer “freak” –tiene alas auténticas– exhibida en un parque de diversiones en pleno desierto mexicana que es un símbolo del amor (alado) capaz de salvar a un antihéroe (ex trompetista que ahoga sus penas de amor en la droga y la bebida es una maravillosa trama que revive las películas donde hombres o mujeres se transforman de tal modo con el fin de sacrificarse por el/la amado/a de todo pasado culposo. Bellamente fotografiada, con un solo de trompeta prodigioso, es un filme condenado por el circuito comerciales. Una pena. Hay un Mickey Rourke excepcional, y un Bill Pullman -con gafas setentistas– sobresaliente para dar vida a una historia de amor que nos eleva hacia allá arriba, donde sólo la ficción dorada del cine puede hacerlo. Imprescindible para cinéfilos. Ante tanta mala película circulando, esta ausencia es una desangelada decisión.