Con los grabadores de abordo en las profundidades del océano, los investigadores estudian la posibilidad de que los monitores externos de velocidad, los llamados tubos Pitot, se congelaron y transmitieron información falsa a las computadoras en medio de una tormenta eléctrica, causando que el vuelo AF 447 se estrelle en el Océano Atlántico.
Los tubos Pitot (ver foto superior), con forma de L, se proyectan del ala o el fuselaje del avión y se los calienta para evitar que se cubran de hielo. La presión del aire que entra en el tubo permite medir la velocidad y el ángulo de vuelo. Su mal funcionamiento puede engañar a la computadora que controla el avión, provocando una aceleración o desaceleración peligrosa.
Air France dijo que empezó a reemplazar en los aviones Airbus A330-200 el 27 de abril apenas dispuso de una versión mejorada y terminará la tarea en las próximas semanas. Los monitores aún no habían sido reemplazados en el Vuelo AF 447.
Esta es una de las causas más posibles del accidente, los tubos pitots sin reemplazar funcionando mal por estar congelados.
La fuerza aérea brasileña dijo que reemplazaría los tubos de Pitot en el avión presidencial Airbus A319 debido a una recomendación del fabricante más de un mes antes de la caída del avión de Air France.
Todos los aviones de Air France que despegaban el martes estaban equipados con dos de los nuevos sensores Pitot, dijo Eric Divry, vocero del sindicato de pilotos SNPL.